La supervisión cumple una función clave como espacio orientado a consolidar prácticas reflexivas y de calidad entre profesionales de la psicoterapia y de otros ámbitos clínicos. La modalidad grupal, conformada habitualmente por pequeños grupos de entre 4 y 8 integrantes, constituye un entorno relacional y de aprendizaje continuo especialmente relevante para quienes desempeñan su labor de manera individual. Dicha estructura permite el intercambio y contraste de experiencias tanto con la persona que ejerce profesionalmente el rol de supervisor como con colegas del sector.
El grupo de supervisión clínica impulsado desde Dirdira Koop se fundamenta en los siguientes principios:
- Se destaca el carácter relacional del proceso, en el que tanto las personas supervisadas como los supervisores y supervisoras contribuyen activamente.
- Las herramientas y técnicas empleadas en función de los casos o situaciones presentadas en el grupo tienen el propósito de ampliar las posibilidades de intervención.
- Asimismo, se promueve la integración de la diversidad de perspectivas como elemento enriquecedor.
- El aprendizaje reflexivo en grupo se desarrolla de forma compleja en distintos niveles: el ámbito personal del profesional supervisado, la temática compartida entre colegas y el grupo considerado como espacio de resonancia y construcción social.
Grupos de supervisión clínica
Programa de sesiones 2026
Enfoque sistémico: En la práctica, desde una mirada sistémica en supervisión hablamos de perspectivas y miradas múltiples. Pensar en el contexto desde donde se interviene desde la complejidad. Multiplicar la visión empática, desplegando y entrenando competencias emocionales. Dentro de los procesos de intervención clínica o terapéutica: No se trata de ver mejor, se trata de introducir diferencias.
“Ver diferente” y de aprender a hacer diferencias, a construir nuevas definiciones de la realidad.
Autopoiesis; La supervisión se orientada a estimular y activar los recursos del sistema .
Explorar y dialogar sobre la noción de neutralidad. Desarrollo de la curiosidad y la exploración del contexto como recursos recurrentes en la construcción de hipótesis.
Aprendizaje reflexivo: Estudio de casos y narrativas de los procesos de intervención como prácticas de aprendizaje y mejora.
Enfoque dialógico y colaborativo: Construcción de equipos reflexivos y espacios de innovación y mejora a partir de los casos o situaciones clínicas.
Enfoque sistémico: En la supervisión clínica, la perspectiva sistémica implica considerar múltiples puntos de vista y comprender la complejidad del contexto de intervención. Este enfoque promueve el fortalecimiento de competencias emocionales y fomenta una visión empática ampliada. En los procesos clínicos o terapéuticos, resulta fundamental introducir nuevas perspectivas y construir definiciones innovadoras de la realidad, más allá de simplemente observar con mayor claridad. La autopoiesis orienta la supervisión hacia la estimulación y activación de los recursos inherentes al sistema. Asimismo, se enfatiza la exploración y el diálogo sobre la noción de neutralidad, así como el desarrollo de la curiosidad y el análisis contextual como herramientas indispensables para la formulación de hipótesis.
Aprendizaje reflexivo: El estudio de casos y las narrativas de los procesos de intervención se utilizan como estrategias clave para el aprendizaje y la mejora continua.
Enfoque dialógico y colaborativo: Se promueve la construcción de equipos reflexivos y la generación de espacios de innovación y avance a partir de la revisión de casos y situaciones clínicas.
Estructura y formato
Grupos de tamaño reducido
(4-8 personas)
Sesiones gratuitas – informativas
4 Diciembre 18:00 2025
16 enero 10:00 2026
Información y solicitud
Plazas limitadas
Supervisión en grupo formato intensivo:
4 sesiones anuales.
viernes de 10:00 a 14:00
Inicio 23 de enero 2026
Supervisión en grupo
8 sesiones anuales
Grupo miércoles de 15:00 a 17:00
(Inicio 28 enero 2026)
Grupo lunes de 10:00 a 12:00
(Inicio 2 febrero 2026)
